La tecnología en las instituciones educativas.
- Dra. Aurora Rodríguez Soldevilla
- 4 oct 2017
- 4 Min. de lectura
En las últimas décadas nos hemos visto irrumpidos con los avances tecnológicos dentro de las aulas, especulando poder aumentar la eficiencia y eficacia de los servicios educativos, fuimos pasando de la radio, el video, las máquinas de transparencias y la televisión a la tecnología digital que actualmente se encuentran en los salones de clases.
Su aplicación y uso en el ámbito educativo ha llegado debido a la fuerte influencia que ejercen en otros medios como puede ser el laboral, el comunicativo y el informativo, generando la necesidad de educar a nuestros alumnos en una nueva sociedad de la información y la comunicación. Sin embargo, las características especiales que presentan estos medios, no deben confundirnos por su apariencia atractiva, sino que debemos analizar con mucho rigor, el medio que se adapte mejor a la situación educativa en la que nos encontramos, a los objetivos que se pretenden alcanzar, a los contenidos, pero sobre todo, a las características de nuestros alumnos, puesto que no todos serán válidos para cada nivel educativo.
El desarrollo tecnológico supone un desafío cultural y social de gran relevancia debido a los cambios que se producen en la forma de vivir, de aprender y de trabajar, produciendo así la sociedad de la información y la comunicación, que se caracteriza por la globalización, la importancia de la información como materia prima y la interactividad que se consigue gracias a su poder comunicativo.
Las nuevas tecnologías pueden ser introducidas en el aula de diversas maneras, ya sea como recurso didáctico, como objeto de estudio, como elemento para la comunicación y la expresión o bien para utilizarlas en la administración o gestión del centro educativo. Siendo importante no perder de vista el propósito para el cual lo vamos a utilizar. En el caso concreto de utilizarlo como un recurso didáctico, partiremos de la primicia de promover ambientes virtuales donde los docentes, alumnos y comunidad educativa interactúen, desarrollando competencias de búsqueda, selección y procesamiento de la información, interacción en escenarios virtuales y presenciales y categorizando el trabajo colaborativo, todo esto centrado en los nuevos modelos pedagógicos de aprendizaje.
Un ambiente de aprendizaje virtual (AVA) es el lugar en donde confluyen estudiantes y docentes para interactuar psicológicamente con relación a ciertos contenidos, utilizando para ello métodos y técnicas previamente establecidos con la intención de adquirir conocimientos, desarrollar habilidades, actitudes y en general, incrementar algún tipo de capacidad o competencia (Herrera, 2006).
Bien sabemos que existen factores que posibilitan y obstaculizan el uso adecuado de las herramientas tecnológicas en nuestras escuelas. Muchos de estos factores provocados directamente en el profesorado, sin embargo hay muchos otros que dependen directamente del presupuesto del sistema educativo mexicano.
Entre los factores internos obstaculizadores se podría mencionar el rechazo de algunos docentes a la actualización para el uso de avances tecnológicos lo cual limita su efectividad, la falta de planeación de clases y la incorporación de estos recursos, la práctica del enfoque tradicionalista en el trabajo con algunas de las asignaturas y la metodología de enseñanza mecanicista.
En los factores externos se puede mencionar la falta de recursos e infraestructura con la que cuentan todavía algunas escuelas, la poca atención que brindan algunos padres de familia en la educación de sus hijos, el desinterés de la sociedad por los problemas educativos provocando el abuso de estas tecnologías.
Es importante mencionar que la tecnología es un recurso didáctico, el cual el docente deberá utilizarlo de la mejor forma con el fin de obtener óptimos resultados en su aplicación, pero que de ninguna manera podrá sustituir el trabajo docente, ni se convertirá en entretenimiento de los alumnos. Por el contrario, el profesor deberá utilizar estrategias didácticas en las que se apoye con la utilización de la nueva tecnología, razón por la cual los maestros debemos no solo ser hábiles en el manejo de la metodología y los nuevos enfoques de enseñanza, sino también ser hábiles en el manejo de las nuevas tecnologías, a fin de obtener el mejor provecho de estos recursos.
Con respecto a las estrategias de aprendizaje, Dick, Carey y Carey (2009) señalan que son esenciales para el proceso enseñanza-aprendizaje. Por tanto, deben definirse claramente las estrategias que se utilizarán. Ferreiro (2007) sugiere un conjunto de estrategias de aprendizaje grupal, las cuales pueden ser utilizadas para nuevos ambientes de aprendizaje, como las Redes Sociales Digitales, entre ellas sugiere: a) el método de la solución de problemas, b) el método de proyectos individuales, c) el método del caso, d) el método del contrato, d) la investigación grupal, e) la observación triádica, f) el seminario, g) el coloquio, h) la simulación didáctica, y i) la ponencia científica. Éstas además propician un trabajo colaborativo entre el grupo, el cual potencializará su alcance pedagógico.
Por otra parte, Ferreiro (2007) argumenta que el trabajo colaborativo es una metodología que requiere agrupar a los educandos para lograr un aprendizaje, en primer término, individual y después de colaboración.
En resumen concluiría que los avances tecnológicos deben ser aprovechados en bien de la educación, del hombre y su desarrollo, y jamás podrán suplantar la acción del profesor, los padres y la sociedad, por lo que se exhorta a los docentes a desarrollar sus competencias para que centre su enseñanza en la realidad actual del estudiante e incorpore las tecnologías de la información a favor de la educación por lo que se propone las siguiente recomendaciones:
Capacitar y actualizar al docente en el uso de recursos tecnológicos.
Aprovechar al máximo los recursos disponibles en las instituciones.
Participar con entusiasmo explorando y utilizando herramientas a fin de obtener el mejor provecho de éstas.
Trabajar acorde a metodologías activas
Planificar las clases con la intención de incorporar la nueva tecnología.
Revisar los Enfoques de las asignaturas y proponer actividades que estén acorde a éstos.
Propiciar actividades que desarrollen la creatividad, la interacción e innovación en los alumnos
Pasar de reproductor de conocimientos a mediador o generador de éstos.
Fomentar la interacción grupal y el trabajo colaborativo.
Diversificar las actividades en el aula con el propósito de estimular los diversos estilos de aprendizaje.
Comprometerse con sus alumnos, escuelas y ustedes mismos para obtener mejores resultados en educación.
Fomentar entre el colectivo docente el trabajo colaborativo, la investigación y la indagación de conocimientos.
Propiciar actividades inter-colegiales.
BIBLIOGRAFIA
Bartolomé R. Antonio. Nuevas Tecnologías en el aula. Guía de supervivencia. Formación continua y uso educativo de las tecnologías. Materiales para la innovación educativa. Editorial Grao, 2004.
De Haro, J. (s.f.). Las redes sociales en educación. Recuperado el día 2 de septiembre de 2012, de
http://jjdeharo.blogspot.mx/2008/11/la-redes-sociales-en-educacin.html
Pierre Carrier Jean. Escuela y Multimedia. Formación continua y uso educativo de las tecnologías. Editorial siglo XXI. 2005.
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